10 Junio 2015

"ICE constructor":
El descaro y las contradicciones de la NACION

Con verdadero asombro e indignación hemos leído el Editorial de la Nación del pasado 3 de junio en el cual se cuestiona que el ICE use su enorme capacidad técnica y experiencia en construcción pesada para vender sus servicios dentro y fuera del país.

No sabía la Nación que el ICE empezó a construir sus propias obras desde hace más de 50 años y que a lo largo de este período ha venido acumulando un enorme capital técnico, reconocido a nivel mundial, siendo la empresa constructora más grande y eficiente de Centro América? No sabía la Nación, por ejemplo, que los tuneleros del ICE son famosos a nivel mundial y que incluso han ido a trabajar a otros países y que Costa Rica ha adquirido un gran prestigio y liderazgo a nivel mundial gracias a los complejos desarrollos geotérmicos del ICE?

No sabía la Nación que el ICE está construyendo el proyecto Reventazón de 305 MW con un costo de casi $ 1.400 millones, el más grande de Centroamérica y la segunda obra a nivel centroamericano después de la ampliación del canal de Panamá, diseñado y construido en su totalidad por ingenieros y técnicos costarricense y que curiosamente no fue incluido por su periódico El Financiero como una mega obra que en estos momentos contribuye para incentivar la economía local, citando El Financiero únicamente la Terminal de Contenedores de Moín? Parece mucha casualidad que la Nación ignore tantos logros de la mejor y más exitosa empresa costarricense y que simultáneamente, continúe distorsionando la realidad para atacar al ICE en su intento desesperado y vano por dañar su imagen ante los costarricenses. Cómo es que tampoco la Nación ha destacado como noticia que desde julio de 2014 las tarifas eléctricas han venido bajando?

No sabe la Nación que el personal de proyectos del ICE funciona como una empresa privada exitosa en un régimen de contratación especial, diferente al del resto de la Institución, que su personal es ocasional y que crece y decrece porque está contratado exclusivamente en función de sus proyectos?; por lo que utilizar este fuerte músculo para generar ingresos nuevos y frescos a la Institución no representa ningún costo adicional, si no que por el contrario, puede contribuir a mejorar la situación financiera de la empresa para impactar positivamente las tarifas eléctricas.

Por supuesto que estos y muchos hechos más son conocidos de sobra por la Nación y por todos los costarricenses pues han hecho grande al ICE dentro y fuera del país, aunque ahora quieran ignorarlos por conveniencia, evidenciando una grave contradicción en su ideología. Los adalides de la competencia, que junto con otras fuerzas económicas han querido siempre privatizar al ICE y que defienden una economía de libre mercado, ahora sienten pasos de animal grande pues el ICE, empoderado legítimamente por la Ley 8660 de “Fortalecimiento y Modernización de las Entidades Públicas”, puede también competir exitosamente con la empresa privada en los ramos de ingeniería y construcción pesada de obra pública. Pero según la Nación, el discurso de competencia y libre mercado solo debe funcionar en una dirección porque el ICE debe ceder parte de sus negocios a la empresa privada con el trillado cuento de la apertura, pero por el contrario, no se le debe permitir ingresar en otros mercados aunque sea en beneficio del país aprovechando su eficiente capacidad de hacer.

Qué otra empresa o Institución en Costa Rica puede decir que tiene tanta y probada capacidad de ejecución de obra, cuando por el contrario, vemos los enormes problemas que tienen muchas de ellas para llevar a cabo sus proyectos? Recordemos que muchas de estas Instituciones tuvieron en el pasado un alto nivel de ingeniería y ejecución, pero fueron perdiendo esa capacidad por decisiones políticas que fueron privatizando paulatinamente su quehacer, cosa que no han podido lograr con el ICE porque ha sido eficiente. Y  como todavía mantiene actividades atractivas para algunos sectores empresarial afines a la Nación, entonces es  considerado una amenaza cuando intenta aprovechar sus fortalezas para competir en esos mercados. 

Así las cosas, la Nación se quita nuevamente la careta y evidencia sus verdaderas intenciones e intereses, que ya de por sí conoce el pueblo de Costa Rica.

Se adjunta para su conocimiento, artículo publicado el 03 de junio en la Editorial de La Nación. “El ICE, ¿constructor?”

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