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Otro punto de vista sobre una misma historia
Don Pedro Pablo Quirós, Presidente Ejecutivo
del ICE, manifestó el 7/01/2008, en un comunicado a todo
el personal: “Quien aspire a ganar deberá intensificar
su intuición. Hay una historia muy interesante al respecto.
Un campesino del antiguo Congo Belga vendió su pequeña
finca para comprar herramientas y seguir la corriente al unirse
a las compañías dedicadas a la minería en busca
de diamantes. Después de un tiempo aprendió a distinguir
los diamantes en su estado primitivo, y recordó haber visto
algo parecido en un riachuelo de su antigua finca. Posteriormente
confirmó su suposición y se convenció de lo
que había perdido por falta de un poco de intuición,
curiosidad y de capacitación. Supo entonces que, por precipitarse,
había regalado lo que en un inicio no tenía que salir
a buscar.”
Si bien es cierto respetamos el resultado del referendo
del 7 de octubre, eso de ninguna manera significa que se deban utilizar
los proyectos de ley que se discuten en la Asamblea Legislativa
para destruir al ICE o para ir más allá de lo establecido
en el TLC.
¿Cuál Gerente General o Presidente
de una empresa regala, facilita y permite que sus bienes más
preciados sean entregados a la competencia? Eso es lo que han hecho
Pedro Pablo Quirós y otros en el “Proyecto de Ley General
de Telecomunicaciones”, al igual que el campesino del Congo
Belga, del que habla en su historia.
Extraña que cite los principios sobre los
que se creó el ICE, cuando en el vergonzoso “Proyecto
de Ley de Fortalecimiento y Modernización de las Entidades
Públicas del Sector de Telecomunicaciones” se cambia
el fin de la Institución, al establecerse en el artículo
3 que la “competencia efectiva” es ahora uno de sus
principios fundamentales y al convertir al ICE, según el
artículo 6, en un simple operador. En el artículo
47 incluso se le pone fin a las actuales concesiones del Instituto.
Don Pedro da su visión del ICE, la misma
que ha orientado la gestión interna en su administración.
La reorganización del Sector de Telecomunicaciones, sin embargo,
no ha tenido el respaldo técnico y organizacional, ni ha
respetado los valores internos en los procesos de elección
de los puestos de jefatura, sumiendo a este sector en un verdadero
caos administrativo.
La acumulación de poder como Presidente
Ejecutivo, al asumir también la Gerencia General, le ha otorgado
poderes ilimitados a Quirós, ante un pasivo y complaciente
Consejo Directivo, lo cual no tiene comparación en la historia
de este Instituto. Ya no se necesita que el Consejo Directivo sesione:
todas las decisiones las toma el mismo don Pedro, solo. Hay que
recordar que “el poder ciega y el poder absoluto ciega absolutamente”.
Bien podría utilizar ese poder para exigir
a las autoridades del actual gobierno los ajustes necesarios a las
leyes en discusión en el plenario legislativo, para que verdaderamente
se fortalezca y modernice al ICE, sin cortinas de humo -como los
engañosos cuatro años que habrían para supuestamente
estar listos para competir-.
No es solamente esta preciada e insigne Institución
-estandarte del desarrollo del país y símbolo de distribución
de nuestra riqueza-, lo que don Pedro ha entregado, sino a todo
un pueblo, en especial al de menos recursos económicos. Ese
pueblo es el mismo que se quedará sin servicios a cambio
de que las transnacionales, a las que Quirós ha servido por
años, engrosen sus ganancias. Su nuevo modelo –de apertura,
privatización y entrega-, destruirá nuestro Estado
Social y la Solidaridad, a pesar de que hoy todavía están
garantizados en nuestra Constitución Política.
Responsabilidad y presencia en la vida
nacional
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